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Experiencias locales

Identidad cultural para la permanencia digna de la vida del pueblo Misak [1]

Juan Muelas, Colombia, Julio 03 de 2007, Este artículo ha sido consultado 8840 veces

Juan Muelas T [2]

 

La lucha de los pueblos Indígenas; compromiso de siempre, ha sido y es el de contribuir en rescatar, revalorar, sembrar, resembrar, proteger y defender el conocimiento ancestral, la autoridad, el territorio, la autonomía y la identidad cultural, lo cual se conjugue en nuestra cultura misak-misak, del que somos portadores como hijos del agua, lo que nos provee y significa el ser, pensar, actuar y vivir; por tener una memoria colectiva y diferente: autentica, única, propia y milenaria que recibimos la palabra y los sueños y eso somos.  Por otro lado, también es necesario saber conocer  y reconocer los conocimientos de corte universal (occidental y alternativos), los cuales también requerimos y lo hemos apropiado y articulado a nuestra vida cotidiana. Por lo tanto, lo mas importante en la posmodernidad es saber seleccionar de manera objetiva y coherente los conocimientos y elementos que se acondicionen o se acoplen a la identidad cultural misak; que ayudaran a complementar y fortalecer los propósitos generales de la permanencia y evolución de la identidad y dignidad Misak.

Por consiguiente, cabe resaltar que la cultura es la condición vital para expresar las diversas manifestaciones: fundamentos, valores, concepciones y principios de la vida misak. En la convicción se refleja los instantes de identidad y dignidad; mental, corporal y espiritual en colectivo e individual para la pervivencia y permanencia como una nueva opción de “evolución” de la humanidad.  Así, como lo es el desarrollo sostenible, el cual precisamente tiene sus bases en las prácticas de relación armónica entre el hombre-naturaleza y que por siglos hemos venido manteniendo los pueblos indígenas.  De hecho, es necesario rescatar nuestros saberes ancestrales y aplicarlos en un nuevo marco de “posmodernidad” que integre lo ambiental, lo cultural, lo social y lo económico, para satisfacer las necesidades de la generación presente sin comprometer la vida y la existencia de las futuras generaciones y de toda la humanidad.

Por lo tanto todos debemos asumir responsablemente esta tarea para dejar legados claros y firmes  a las generaciones del mañana, para fortalecer las relaciones de interculturalidad como parte de la sociedad colombiana y del mundo.  Porque hoy por hoy mas que nunca, estamos expuestos a las diversas circunstancias cruciales, en los cuales los pueblos menos favorecidos como el nuestro, requiere de unas herramientas propias para resolver los problemas internos y externos y a su vez ser idóneos en el fortalecimiento de las capacidades, para hacer realidad los propósitos comunes e individuales como pueblo, esta labor esta fundamentado en tres (3) grandes ejes centrales como son el territorio, la cosmovisión y la convicción Misak con sus respectivas particularidades e interpretaciones especiales.

 

La cosmovisión

La manera como entendemos, interpretamos la naturaleza desde la concepción misak- misak del por que decimos y somos hijos de la palabra, los sueños y el agua.  Por que la identidad, dignidad y permanencia de la vida de nuestro pueblo fue, es  y será fundamentado en la existencia y vivencia de la ancestralidad en función de este vital liquido (padre- madre),  “el agua semilla de todas las especies vivas, visibles e invisibles; la tierra es el germen femenino que al unirse con el agua  se hacen fecundos y perpetúan la vida”.  De hecho, el nacimiento del pueblo Nam Misak (Wampia), esta armónicamente relacionada con la existencia de dos seres espirituales como: el kallim (masculino) y el pishimisak (femenino), los cuales dotaron de dos lagunas llamadas Ñimbe (mujer agua) y Piendamo (hombre agua).  Estos a su vez, originaron los  hijos de la palabra, los sueños y el agua.  En honor a esta maravillosa creación espiritual actualmente nos llamamos Nam- Misak - Misak. Esta concepción de origen entregado a nosotros contempla mandatos de como administrarnos, gobernarnos, dirigirnos, regularnos y comportarnos en nuestro territorio y el universo, por medio de diferentes usos y costumbres (normas) en sus diferentes jerarquías, empezando por el pishimisak (ella), kallim (el), Ní (persona mujer), No (persona hombre) tatas, mamas, taitas, nú tatas, nú mamas, kushin tatas, kushin mamas, kasukos, urek y como era antes los kasik (los kasikes) y los mutautas (los sabios espirituales y de justicia).

Dicho mandato espíritu-ancestral nos ha permitido permanecer, convivir, intercambiar, compartir, colectiva y solidariamente, en armonía y reciprocidad con su entorno natural; el cual debe ser ofrendado con rituales de refrescamientos en gratitud, veneración y respeto, por medio del uso de la biodiversidad como la hoja de koka por eso es que la llamamos numama koka, hija de la madre de los bosques o sea del kauka.

Por tanto las diferentes apreciaciones y concepciones acerca de las aguas en combinación con la numama koka hacen que se constituya en una responsabilidad nuestra, compartir un saber milenario a nuestros hijos y al mundo, en aras de devolver y aportar la sacralidad heredada por los Misak-Misak (Wampia) y que se pretende preservar, conservar, reapropiar, y aprovechar nuestras manifestaciones culturales como formas de vida.

De la cosmovisión  nacen las normas, los principios, los valores, la ética, la justicia, entre otras, son las que orientan y viabilizan benéficamente y contribuyen a su propia sostenibilidad cíclica natural o “ambientales” que se deben aplicar en la vivencia del pueblo Misak; en términos de respeto a la naturaleza y el hombre.  Por eso decimos que fuimos y somos culturas cosmocraticas, por que es el sistema de gobierno y de autoridad según las normas naturales nacidas de la madre naturaleza para gobernar a los hombres y a los demás seres en función de preservar la cultura y conservar la naturaleza

 

Territorio

Constituye el espacio vital y significa kauka en toponimia (guambiana) madre de los bosques, el uso, manejo cultural requerido y compartido de espacios. En nuestra lengua y cultura no hay espacios baldíos, todos los espacios cumplen una función especial, si un espacio esta desocupado y es de uso esporádico o de ritualidad no significa baldío, y no es improductivo; por que produce agua, oxigeno y alimentos para otras especies animales que se ven a simple vista y que no se ven, cada espacio tiene su nombre.

No hay especies o biodiversidad silvestre como dicen los académicos, en los distintos pisos térmicos milenariamente habitados por las poblaciones o etnias existe biodiversidad cultivada por el hombre y cultivada por nuestros dioses (no hay especie silvestre), por que allí habitan los espíritus y las madres de nuestros alimentos (plantas y animales) que hoy los nativos y todo el mundo se alimenta, se sana y se cura, de las aguas que todos “tomamos”, las fibras que nos viste, las rocas que son templos de nuestros espíritus y del aire que nos señala cuando, donde, quien, como, que, invocar, sembrar, cosechar y consumir, por allí esta la semilla del agua, al igual que el maíz el agua también se puede sembrar, para que nazca una nueva fuente, cuidarlo para verlo crecer,  por eso el guambiano era, es y será sembrador de agua, para el occidental el agua es un recurso no renovable, para el misak el agua se puede sembrar, sembrar agua no cercando con alambre, ni sembrando árboles en un pantano, no con métodos de la ciencia forestal, lo nuestro es sembrar agua donde no hay agua, con semilla de agua, eso, es lo que sabemos, eso es lo que hacemos, por eso la hoja de koka o numama koka es la base de la ritualidad en cada una de las etapas del ciclo de vida del misak – misak, eso es nuestra identidad, eso es nuestra dignidad, por eso no entendemos que es el desarrollo, cuando ensucian y envenenan las aguas.
 

Kauka: Madre los bosques, la historia colombiana hablaba del gran cauca, comprendía desde el chocho hasta Quito.

ESPACIOS  MISAK

TOPONIIA ANTIGUA

TOPONIMIA ACTUAL

SIGNIFICADO

PARA EL COLOMBIANO

 

 

 

 

 

NÚWAMPIK CHAK SRO Espacio vital de clima caliente.

Pisitaw,

Piscitao

 

 

 

Son sitios donde se vivió o se vive Temporal: Sagrados de ritualidad Intercambio o comercio Permanente: Cultivando y/o cosechando semillas, plantas sembradas por la naturaleza minerales, animales, vegetales, aguas

 

 

 

No significa nada, por tanto es baldío, la existencia de biodiversidad desconocida para los taxónomos entonces es silvestre.

Atiku,

Hato

Kaldønuk

Caldono

Tun’ya,

Tunia

kal’utu,

Caloto

Turim’piu,

Toribio

kølin’shagu,

Quilichao

Kilkasrø,

 

Mendø’nok,

Mondomo

kalim’piu,

Calibio

Pala’srø

Palace

Yautu (Puapayan).

Popayán

Tom’pio,

Timbio

Nu’pirau.

Novirao

Yawampiktaraw

Yambitara

 

 

PICHANTUN KETA: Espacio vital de clima frió.

 

Pura’srø

Purace

Kuknuk’srø

Coconuco

Piu’ya

Pioya

Kish’ku

Quisgo

Penø’piu

Penebio

Panik’keta

Paniqueta

Purayatun

 

PISHINPALAWAN: Espacio vital de páramo y nieves.

 

Ñim’pio, Pisu’shak,

Ñimbe

malpasrap’shak,

Mavaza

Pantsø’tarø,

Pasitara

Tuk’tarao,

Totoró

Pullan’tarø,

Polindara

Palotara.

Paletara

 

Cada espacio corresponde a un tiempo y ritualidad que son requeridos por cada una de las etapas del ciclo de vida, hoy algunos están dentro de los actuales resguardos como matsorek`tun, puraya`tun, kiship`tun, kiship`kully, chillik`kully  etc., otros por fuera de los resguardos y territorio ancestral que eran compartidos como penotun, penobio etc., esta gran perdida nos ha limitado dirigir nuestra palabras y mensajes sagrados para invocarlos, visitarlos y hacer nuestras ceremonias. Por eso cuando hablamos de permanencia cultural y luchamos por misrop piro (tierras de sistemas agrícolas o agrocultura), misrompiro (espacios sagrados),  nú Piraw (territorio), administrados y gobernados por los tatas (gobierno), y los mutautas (sabedores espirituales y de justicia natural).

 

Tierra

Ante todo la tierra es nuestra madre, que nos acoge, protege y brinda todo, vida y existencia para todos los seres tanto los visibles e invisibles, como una madre que brinda calor, amor, ternura, comida, techo, abrigo y vibra a sus hijos cuando la maltratamos. Ella necesita ser correspondida espiritualmente. La tierra necesita que los hombres la respetemos, la adoremos y la alimentemos con las ofrendas y ritualidades, toda esa ofrenda se hace con los derivados de naturales de la hoja de koka (no se refiere a derivados químicos).

Según el concepto del gobierno y sus instituciones la tierra es cualquier extensión, porción de llano o loma que da comida. Se habla de la Unidad Agrícola Familiar (UFA), de explotación, desarrollo, empresa, PIB, rentabilidad, acumular; pero esa concepción limita la prosperidad cultural, imposibilita realizar la ritualidad, la accesibilidad a la biodiversidad y elementos naturales que la identidad misak lo requiere en las etapas del ciclo de vida.

El misak-misak ancestral depende del cosmos. Por consiguiente, no hay democracia, por que  no es el hombre quien crea la ley; sino la naturaleza que gobierna la vida del hombre a través de la cultura. Esta concepción de vida es la que nos hace ser diferentes, entonces somos culturas cosmocráticas:  Las anteriores consideraciones y afirmaciones identitarias son violentadas por las leyes del congreso y del gobierno, ya que lesionan nuestras formas de vida. Los pueblos indígenas necesitamos leyes que garanticen la formación y el ordenamiento del ser humano, no solo es del territorio sino que también debe ordenarse el pensamiento, el sentimiento y el actuar. Solo así se hará un verdadero Ordenamiento Territorial. De lo contrario jamás se podrá garantizar los principios de equidad, reciprocidad, ética, con su propia gente, la cosmovisión y el territorio, sin él no habrá paz. Esta concepción de vida es la que garantiza nuestra armonía y equilibrio entre la naturaleza, material, espiritual y social de los Pueblos.

A continuación exponemos el grafico matriz del ciclo de vida donde la primera parte esta orientada en la explicación de la matriz del mapa y sus relaciones con el territorio (espacio vital), la cosmovisión (consejero de usos y costumbres) y la convicción misak (la vivencia real del ser) y la segunda parte contiene la explicación de las etapas del ciclo de vida y sus requerimientos como componentes especiales.

Por lo tanto vale resaltar que la formación de todo núcleo familiar, las grandes familias, las comunidades y el pueblo deben estar ligados a las tres tulpas como una sola matriz fundamental; ya que estas son la resultante de la interacción coherente alrededor de las tres tulpas, creadoras  de todos los principios, valores y concepciones ancestrales.       

Las etapas del ciclo de vida son un orden estricto de la naturaleza y convicción misak, que entrevé el género y generación sin alterar los procesos de vida cultural. De hecho, podemos mencionar cada una de las etapas. Es así como la etapa Preconcepción, consiste en saber sembrar, dirigir, sugestionar, grabar y asimilar el mayor “plan de los planes” desde el pensamiento, el sentimiento y el actuar. Ya que esta etapa de vida  es una exigencia en función de los componentes del territorio, tierra y territorialidad; por tanto la existencia del misak requiere de la biodiversidad (alimentaria, medicinal, ornamental entre otras), los sistemas agrícolas, vivienda, vestido, música, lenguajes, usos y costumbres etc.  Dichos componentes de las etapas del ciclo son los determinantes de la conducta individual y colectiva en la formación personal, familiar, de comunidad y pueblo. La biodiversidad alimentaria es clave y determinante de la permanencia de la identidad y dignidad del pueblo Misak, es así, como los múltiples colores de frijoles y maíces, formas y tamaños de tubérculos obedece a un requerimiento en cada una de las etapas del ciclo de vida, para ofrendar y ritualizar la vida. 

Etapa Concepción consiste en ser competente y responsable del deber de hacer realidad el pensamiento, el sentimiento y el actuar. Ya que esta etapa de vida se complementa en la vida real cuando lo preconcebido se manifiesta en los comportamientos del ser misak; por ejemplo la escogencia de la pareja determina el éxito o fracaso de la vida futura. Por que el asumir tal responsabilidad significa apropiarse en forma compartida todas las obligaciones individuales y de pareja; es así como es obligatorio para el hombre elaborar el tambal kuari y otros elementos e instrumentos necesarios para el vestuario complementario para él mismo, su mujer e hijos. Y a la mujer le corresponde realizar el Turi, el nilo turi,  anacos, chumbes, gorros, hilar, tejer, entre otras que hacen parte del uso y manejo de la biodiversidad, los sistemas agrícolas, la vivienda, la música se articulan coherentemente.

Etapa Nacimiento que consiste en saber dirigir el pensamiento, el sentimiento y el hacer, por que es la resultante de los dos anteriores, pero al presentarse inconsistencias en el actuar,  dará como resultado un nuevo ser menguado desde el punto de vista biológico, cultural, filosófico y espiritual. Estas irregularidades se reflejan muchas veces en las siguientes etapas como la niñez donde empieza a ser excluido de su núcleo familiar, la gran familia, la comunidad y pueblo.

Así sucesivamente se puede observar que en la etapa de juventud  se logran visualizar muchas tendencias y conductas  que no son aceptadas  por la sociedad, por ejemplo: si una joven no esta preparada según los requerimientos culturales desde su núcleo familiar en cuanto a sus funciones de genero y generación que le corresponden para su realización personal y colectiva, estará sometida a ser calificada como alguien inútil e irregular de la su sociedad y es tomada como referente de mal ejemplo.

 

Agrocultura

La agrocultura (cultura del agro) es un concepto de “sistemas” de soberanía y seguridad cultural, fundamentado por la cosmovisión ancestral que faculta el buen uso y manejo armónico y equilibrado de las potencialidades y debilidades del territorio y la tierra, la biodiversidad, sus concepciones, valores, hábitos alimenticios, nutricionales y medicinales como respuesta al requerimiento del ciclo de vida (preconcepción, concepción, nacimiento, niñez, juventud, adulto, mayor, muerte física y regreso espiritual)  del pueblo Misak.

Es así como, la agrocultura nos da a entender que no es explotación agropecuaria como siempre lo han llamado, no es una política estomacal como lo plantea la seguridad alimentaría, no son huertas de pancoger, ni  la simple producción, mucho menos es la formulación de una dieta balanceada que plantean los nutricionistas.


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[1]Pueblo Misak: pueblo guambiano (Departamento del Cauca)
[2]Comunero Misak del Kauka. C.e: biomuelas@yahoo.com

Publicado en Julio 03 de 2007| Compartir
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