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Experiencias Locales

El Parque Natural Regional del Duende, una experiencia de gestión comunitaria

José Abelardo Salgado L.[1]

 

El Parque Natural Regional del Duende se encuentra en las cumbres de la cordillera 0ccidental en el departamento del Valle del Cauca entre las cotas de los 2.200 y 3.900 m  compartido con los municipios de Riofrío, Trujillo y Calima El Darién. El 9 de agosto de 2005 el Concejo Directivo de la Corporación Autónoma del Valle del Cauca CVC, declaró el área de páramo y la zona de influencia localizada dentro de su jurisdicción con una extensión de 14.521 hectáreas como Parque Natural Regional mediante el acuerdo No. 029/2.005. El parque no incluye asentamientos humanos y de acuerdo con la zonifica­ción propuesta por las comunidades locales y la fundación ecológica fenicia defensa na­tural Fedena, la zona de amortiguamiento delimitada para el Valle del Cau­ca es de 40.000 hectáreas aproximadamente. 

Actualmente la CVC y Fedena, están adelantando gestiones importantes con el departamento del Chocó buscando acuerdos para la ampliación del área de cobertura del Parque Natural Regional del Duende, incluyendo el área de páramo y zona de influencia en la vertiente occidental de la cordillera, en jurisdicción de la Corporación Autónoma del Chocó.  

El Páramo del Duende abarca aproximadamente 2.500 hectáreas entre los 3.300 y 3.900 m de las cuales 1.562 hectáreas se localizan en el departamento del Chocó jurisdicción del Municipio del Litoral del San Juan que tiene como cabecera a Docordó, y 316,17 hectáreas en el departamento del Valle del Cauca. El Páramo se encuentra aislado de otros páramos y esta bordeado por una franja amplia de bosques altoandinos, muy pendientes y terrenos escarpados que actúan como barrera para la intervención an­trópica. 

 

Hidrografía

Cuenca del río San Juan (Pacífico): Esta cuenca recoge las aguas de los ríos San Quinini, la Playa, Copomá, Paradó, Munguidó, Pata Sola, los Espíritus, Azul, el Militar, el Tambor, Bravo y Calima. En general esta área presenta la gran mayoría de las corrientes de agua medianas y pequeñas sin nombre, aparentemente por la baja densidad de población ubicada en ella. 

Cuenca del río Cauca (Atlántico): La cuenca del río Cauca recoge las aguas que vierten en la parte centro norte del P.N.R del Duende en el municipio de Riofrío, el río Riofrío en un recorrido de 49 km. Recoge las aguas de los ríos: Blanco, el Duende, Volcanes, Claro, Lindo, Arauca, Cristales, Medio Pañuelo, Cáceres, Chiquito, Culebras y Cuancua. Estos a su ves reciben las aguas de numerosas quebradas que a su paso surten acueductos veredales y munici­pales. 

 

¿Qué estamos haciendo para proteger la región del Duende?

Educación

Una de las acciones que se viene impulsando es la educación ambiental enfocada hacia una formación integral del ser, dirigida a los niños y jóvenes de la región del Duende; en aspectos ecoló­gicos, apoyamos los proyectos ambientales escolares PRAES en las diferentes instituciones; donde los discípulos desarrollan competencias afectivas, familiares, ciudadanas, tecnológicas y se pueden formarse con amor hacia sí mismos y los demás, con sensibilidad social y sentido de equidad y pertenencia, con sentido ético y ecológico, con disposición para el manejo de problemas, con capacidad para trabajar en equipo, de tal forma que sean autónomos y responsables. 

Este trabajo de formación constante, nos ha permitido tomar conciencia sobre nuestro cada vez más profundo empobrecimiento ambiental en aspectos como: generación de desperdicios, contaminación del aire y de las fuentes de aguas, destrucción de nuestros ecosistemas, extinción de especies, exceso de ruido, deterioro de las relaciones humanas, violencia, amenazas del modelo de desarrollo dominante, apropiación y privatización del agua entre otras situaciones. 

 

Organización y desarrollo comunitario

Cuando hacemos organización y desarrollo comunitario, siempre insistimos en que el desarrollo siempre se refiere a personas y no a objetos y que el fin ultimo del desarrollo no debe ser ni produccionismo, ni consumismo, sino la satisfacción de las necesidades humanas fundamentales que no solo son necesidades del poseer sino también necesidades del ser.  

Fedena ha participado en la conformación de diferentes organizaciones de base comunitaria que coadyudan a la protección y conservación del PNR del Duende, dentro de las cuales se destacan las Fundaciones: Produende, Fundavi, Salónica verde, Río Claro, Sembradores de Vida, Asoduende, Galvi, Genav, ecoternuras, entre otros. 

 

Otras actividades complementarias

•    El carnaval del duende. Con estas actividades se busca el reconocimiento especial al derecho a la memoria de nuestras comunidades y aporte a la construcción de nuestra cultura campesina, teniendo en cuenta temas y objetivos que propendan mantener vivas las prácticas tradicionales de producción, el sentido de pertenencia basada en sus propios conceptos de espacio y territorio, que pongan de relieve la medicina tradicional, los usos de la naturaleza, las fiestas, las creencias religiosas y míticas, las formas de organización social, así como cada una de las manifestaciones culturales. 

•   Sistemas agroforestales. Estamos trabajando para cada uno de los miembros de la escuela, la imple­mentación de al menos una hectárea en cultivo diversificado que contienen (huerta, frutales, plátano, yuca, maíz, arracacha, fríjol de bejuco, y caña entre otros; esto nos permite mejorar el paisaje, diversificar el entorno y hacer mas armonía de la naturaleza, con esto también abandonamos el monocultivo, los químicos y nos oponemos a las semillas transgénicas. Este trabajo o sistema se establece siempre cerca de la casa con el fin de que toda la familia participe de las labores de campo y se aproveche mejor el tiempo. 

•   Manejo de los suelos. Los encargados de este oficio son “los pachos” de cada escuela agroeco­lógica, esta debe de velar por el buen uso y la conservación de los suelos de su parcela. Las persona que conforman la escuela son quienes analizan las coberturas, la perdida y la ganancia de los suelos, asesoran la practica de mínima labranza, la forma de siembra, los tipos de cobertura y los abonos a aplicar para su recuperación, lo mismo que la recomendación para el uso de los suelos- sistemas silvopastoriles, agrofo­restales, etc. 

•   Manejo de agua. Esta tarea le corresponde al “Aguador”, quien en cada una de las escuelas se encarga de hacer un reconocimiento de las micro­cuencas, humedales, acueductos, etc. de su vereda; igualmente revisar cuáles son los problemas que presentan: contaminación, deforestación, desliza­mien­tos, peligros, etc. Una vez compartidos estos saberes con todos los miembros de la escuela se procede a desarrollar los programas para su solución: viveros comunitarios, refores­tación, aislamientos con cercas de alambre y cercas vivas, recuperación de cercos degradados –zanja de coronación. Estas actividades se desarrollan con todos los miembros de la escuela– en mingas que se hacen cada vez que sea necesario. 

•   Salud y medicina alternativa. Esta actividad es responsabilidad de los “chamanes, hierbateros o duendes”; estas personas se encargan de establecer para cada escuela, un cunuco de crianza de plantas medicinales, donde la participación de las mujeres es fundamental (cunucos acompañadas de hortalizas). 

•   Escuelas campesinas de agroecología. Estas escuelas conformadas alrededor de cada una de las organizaciones, nos ha permitido el encuentro con lideres y organizaciones campesinas que multiplican el saber campesino a través de sus propias técnicas, metodologías y las diferentes alternativas de investigación que sean compatibles con su cultura y diversidad ecosistemica local; de esta manera cada escuela esta abriendo paso a un desarrollo local campesino con autonomía y pertenencia bajo los principios de:

     *   Soberanía alimentaría y acceso a la tierra.

     *   Recuperación y fortalecimiento de la cultura agraria.

     *   Conservación y manejo de la diversidad ecoló­gica y ecosistemica.

     *   Producción de alimentos y otros productos sanos.

     *   Producción de alimentos para la seguridad alimentaria familiar, local y regional. 

En este sentido estamos trabajando en la recuperación de semillas. “Los custodios” de cada escuela son los encargados de recuperar y conservar las semillas criollas de maíz, fríjol, arracacha, plátano, etc.; así cada uno tiene su banco de semillas donde se seleccionan y se renuevan periódicamente. Esto nos permite la autonomía en la alimentación de la familia, y mantener el abastecimiento para las familias pertenecientes a la escuela. 

Cada año en el marco del carnaval del duende hacemos el encuentro de escuelas campesinas de agro­ecología donde otros campesinos de la región pueden adquirir las semillas.

 

¿Qué hemos aprendido del proceso?

•    A participar activamente.

•    A conocer nuestras organizaciones de base.

•    A trabajar con los actores y sus valores.

•    A establecer aspiraciones y necesidades humanas.

•    A valorar al otro, a nosotros mismos.

•    Y seguiremos aprendiendo a vivir, todos los días.

 

[1] Representante Legal FEDENA. C.e.: fedenaduende@yahoo.es