GRUPO
SEMILLAS

Contexto

El mercado por la vida de “La Pavona”

La Pavona es un barrio popular de Armenia (Quindío, Colombia) en cual un grupo de personas vinculadas con las Comunidades Cristianas de Base, trabajan a favor de los sectores más afectados por la crisis a la que los ha llevado el modelo neoliberal del gobierno, siguiendo los consejos de las potencias mundiales. Con la comunidad de este barrio, realizamos unos primeros encuentros. Somos campesinos y campesinas que llegamos de la Provincia de Entre Ríos de Calarca y Córdoba y que queremos estar cerca de otros habitantes de los barrios populares, que en su gran mayoría provienen del campo, desplazados por la violencia económica y social, que en estos momentos nos golpea y despedaza.

A los Mercados por la Vida llevamos los productos de nuestras pequeñas parcelas. Son en su totalidad productos agroecológicos. Hace seis años que estamos organizados en Escuelas Campesinas de Agroecología y estamos produciendo limpio, primero para que coma limpio la familia, después para que los vecinos de la vereda coman limpio y finalmente para que nuestros mismos hermanos campesinos, que ahora están en los pueblos, coman limpio. Alguien puede hablar de que lo que hacemos es solidaridad campesina, que se abre a otros sectores obreros y populares.

Por naturaleza somos fraternos y queremos que los otros del pueblo, sientan que los queremos y los entendemos; sabemos que no se vinieron para el pueblo por que ellos quisieran, sino por que la situación los obligo. Queremos seguir siendo solidarios con ellos, aunque ya no estén en el campo. Son parte de lo que nosotros llamamos cultura campesina o sociedad campesina, son parte de nuestra alma campesina, que ahora está regada por toda Colombia.

El Mercado por la Vida es un sitio para el encuentro; el encuentro entre los que cultivamos, criamos y sacamos al mercado los productos de la actividad cotidiana. El encuentro es entre nosotros y los y las compañeras de los barrios populares. No queremos vender en supermercados, queremos compartir con quienes nos compran, queremos hacernos visibles para la sociedad, que se sepa que gracias a nosotros llega a la mesa el pan, queremos reivindicarnos en la sociedad, como seres que hacen posible la vida de muchos. Queremos que se valoren nuestros saberes y nuestra cultura, y el mercado por la vida nos sirve para eso. En el mercado charlamos sobre nuestras realidades y nuestros sueños y aprendemos a oír los sueños de otros, para tratar de construir sueños comunes, entre todos. Sin este espacio, estaríamos aislados de los otros; solo seriamos productores de comida. Por eso reclamamos que los campesinos podamos tener sitios en los que vivimos el encuentro. El encuentro entre nosotros, con otros y con nuestras propias raíces.

·    Un primer momento del mercado es el trueque, donde compartimos entre todos lo que tenemos y hacemos que todos los compañeros dispongan de lo que cada uno de nosotros produce.

·    Un segundo momento es el de la solidaridad, dando cada uno un poco para la gran canasta comunitaria, que se le entrega a una familia del barrio mediante una rifa o por acuerdo.

·    Un tercer momento es el acuerdo de precios, que se realiza con los delegados de la comunidad para ponernos de acuerdo con los precios, sin afectar al compañero comprador, ni afectarnos nosotros.

·    Un cuarto momento es el mercado como tal, con expresiones de lo que somos y de encuentro para dialogar e intercambiar saberes.

·    Un quinto momento es la evaluación de lo que hemos hecho en el mercado.

Esto es un proceso que tenemos claro todos, pero nos cuesta trabajo cumplir con los componentes que hemos dicho. Sin embargo paulatinamente cada vez tratamos de cumplir, para ser mejores compañeros y compañeras de los Mercados por la Vida de CORPOCAM.

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Informes: Surcos Comunitarios, surcomun@interco.net.co